Tacha

Espero en el reflejo, aturdida, obnubilada ante aquella luz que reflejan tus dias y tus mañanas.
Nos sabemos sufrientes, sintientes, desprovistos de escudos y a la vez llenos de espinas
de colores, de sabores y  humedad.
La bruma será de la noche en guardia que no hace más que evidenciar cuan terrenales somos.
Aletargada en el proceso, sumida en la corriente, por momentos estática, por momentos esquiva, confusa y tempestiva.
Invaden las preguntas, se escapan las respuestas.
Más que mirarte jugar, puedo sentirte disfrutar. Puedo percibir en mis sentidos, no sólo observar.
Gritos, invasión constante, vueltas circulares de luces sin freno.
Y bellezas deseosas de vida nos esperan...

Estoy lloviendo

Aletargado vacío de tristes ensueños,
despierto en un grito ahogado, de esos que jamás sentirás.
Puro deseo, puros comienzos, puras necesidades autocreadas para fenecer.
Te acoso en algún rincón de este poblado desierto.

Se ha borrado todo cuanto he creado,
no puedo dejar de turbarme,
de chocarte con mis palabras y de rodarte con la sal que nos baña.
Me dudas y confundes, aborrezco este cliché.

Nubes terrenales

Desdoblada, hablada, alada, volada y dejada
El sabor de lo que sudo, el dolor que expecta,
la ternura que me ciega y las manchas que observo parecen bailar,
danzan alrededor de las órbitas ciegas de tu existencia.

Espero ansiosa el día fatídico, donde tu silencio como escudo dejará de ser razón para sólo ser.
Tomarás formas incomprensibles y dejaré de verte para volver a verte.
Apareados animales, sonidos de la tierra y la memoria de infinitas noches en sólo una expresión...
tú expresión negada, predecible, forzada y mutilada.
Tus vicios, malditos vicios insomnes que copulan como el fin de los días
Y eyaculan como el principio del caos

Si mi propia imagen se va, ¿cuánto queda?
Vagos recuerdos, morbo de aroma, pieles que rozan, palabras soeces repetidas hasta el cansancio.
Lenguas que se buscan, que se tocan, se atraen, seducen, vomitan y se lamen...
Y lamo, lamo...y la amo

Perderse

¿Cómo retomar los días sin motivación?
¿Buscando dentro, en el interior?
¿Y cómo es eso?
¿A qué sabe?
¿Qué destinos ocultos surgen cuando cambian las preguntas?
Parezco volar y callar.

Aferrarse a lo familiar en lo desconocido,
desarraigo perpetuo, histórico, atemporal.
Adentrarse en un mundo incierto,
con las mismas reglas de la certidumbre.

Conquistar las cadenas de poder que hoy se exploran a si mismas,
encapsular el tiempo,
dejarse dormir sin despertar,
soltarse a vivir sin reglas claras.
Recrearse infinitamente,
humanidad pura.

Haceme gemir